Licurgo, legislador de Esparta, educó, se dice, a dos perros, ambos hermanos, ambos amamantados con la misma leche, uno engordado en la cocina, el otro acostumbrado por los campos al sonido de la trompa y de la corneta. Queriendo mostrar al pueblo lacedemonio que los hombres son tales como la educación los hizo, puso a ambos perros en pleno mercado y entre ellos una sopa y una liebre; el uno corrió al plato y el otro a la liebre;
¡Y sin embargo, dijo, son hermanos!
Étienne De La Boétie
La sacre de Napoléon Jacques-Louis David Musée du Louvre |
No hay comentarios:
Publicar un comentario